Historia de Carlos y André

                                                             Carlos y André

Carlos era un niño que nació en una familia disfuncional, ya que su padre lo abandono recién nacido y nunca tuvo una figura paterna. Durante su niñez creció rodeado de mujeres, una de ellas era su abuela Anita, la cual lo sobreprotegía mucho, ya que era el único varón de la familia. En sus primeros años de vida, no le afecto mucho no tener un padre, puesto que su madre y su abuela lo consentían mucho. Además, también vivía con sus primas y jugaba con ellas, la mayoría de veces a las “Barbie” o a la “cocinita”. Durante toda su niñez Carlos no se preocupó por no tener padre, él era feliz viviendo con la familia que le toco. Ya casi llegando a la adolescencia este sintió con más fuerza la ausencia de una figura paterna, ya que comenzó a tener muchas dudas y le daba vergüenza hablar de ciertos temas con su madre o su abuela. Fueron tiempos donde él se alejó de sus amigos, se volvió un chico callado, un poco introvertido, todos se dieron cuenta del cabio de actitud, ya que fue muy drástico. Se comenzó a juntar con más chicas. Sus amigos lo comenzaron a molestar de “maricon”, pero a él no le importaba, se sentía cómodo compartiendo tiempo con su amigas, ya que él había crecido rodeado de mujeres.

 Hasta que un día se dio cuenta que lo que el sentía cuando se acercaba a un hombre no era lo mismo que sentía cuando estaba con una mujer poco a poco se empezó a dar cuenta que le atraían los chicos, pero no quería decir nada porque sabía que su familia no lo iba a aceptar y sus amigos se iban a burlar. Hasta que conoció a un chico en el centro comercial llamado André se volvieron muy cercanos y este le ayudo a integrarse más con sus amigos. Un día André le dice a Carlos que le tiene que contar algo importante, van a su casa y le cuenta que él era gay y ya no podía ocultárselo más, porque le gustaba, peor temía que dejara de ser su amigo; Carlos, le dice que también le tiene que confesar algo, que él también es gay, pero tiene miedo que su madre se entere al igual que sus amigos, ya que anteriormente lo molestaban sobre ese tema. André, se sintió muy feliz que Carlos lo aceptara y más aún que sintiera lo mismo que el sentía y lo incentivo a que se lo contara a su madre. Lamentablemente su madre no reacciono igual y menos su abuela que era muy conservadora; por ello, consideraron que se tomara esta situación es secreto mientras convencían a Carlos que era un varón y no una mujer. Por ello, lo inscribieron en un colegio militar, fue ahí donde sufrió mucho se burlaban, lo insultaban, lo golpeaban, hasta sus profesores lo trataban como un animal raro e incitaban a que sus compañeros lo trataran mal, pero Carlos estaba convencido de su decisión sexual y fue donde su madre le conto a su familia para tratar de ayudar su hijo a que no tomara malas decisiones y que ser homosexual era una deshonra  para la familia, pero debes de ayudar lo trataron mal.

 Carlos se sentía decepcionado de su propia familia, fue así que huyo de su casa tratando de encontrarse a el mismo y ser aceptado por los demás como era “una mujer atrapado en un cuerpo de hombre”, fue donde Andrés para contarle lo que había sucedido pero encontró a su amigo golpeado lleno de sangre, su padre lo había golpeado por que le conto de sus preferencias sexuales y su padre creía que era una solución para quitarle lo “maricon” pero André  le dijo que él se fuera solo, que no podía porque temía de las represalias de su padre entonces fue donde huyo solo; sin embargo, se encontró en una situación aún peor donde las personas consideraban que cada homosexual era portador del VIH o SIDA y que ellos no eran seres humanos sino parásitos que deberían ser exterminados de la tierra. La travesía de Carlos fue dura, ya que no conseguía trabajo, no tenía donde vivir, ni que comer, se sentía rechazado, con baja autoestima, calumniado por personas que no lo conocían y discriminado por su propia familia.

El recordaba el pasado para saber cuál era lo que había originado sus preferencia sexuales y culpaba a todos de lo que estaba pasando en su vida, pero más se culpaba el mismo por haber elegido ser homosexual, ya Carlos estaba muy deprimido, no encontraba sentido a su  vida, fue entonces donde decidió quitarse la vida. Una noche donde todo era silencio, en el techo de una casa Carlos vio un tubo que estaba colgado en lo alto, subió y fue ahí donde agarro su correa y se presionó sobre su cuello hasta quedarse sin aire.